martes, 7 de marzo de 2017

SEÑALES DE VIOLENCIA EN EL NOVIAZGO DE ADOLESCENTES...

@produsegval  www.produseg.com  (BM)
Como parte de nuestro perfil, nos gusta analizar  problemas con  un  enfoque preventivo,preferiblemente problemas,de los que poco se habla abiertamente en los entornos familiares, empresariales y sociales; pero que existen y son una realidad “in crescendo”.  

En este caso,nos detuvimos a analizar, en este post, la violencia en el noviazgo de adolescentes.

Para poder adentrarnos en el tema, y escribir con propiedad, estuvimos escudriñando la version digital del libro: “Violencia en el noviazgo entre los Jóvenes Mexicanos (2007) de los autores Roberto Castro e Irene Casique”, libro pionero, que gentilmente recibimos en un newsletter del grupo mexicano Paladín, libro que analiza una realidad que puede extrapolarse a  muchos países latinoamericanos.

En este  texto conseguimos un conjunto de aspectos alarmantes,los cuales posesionan,desde hace años,a la violencia en el noviazgo de los adolescentes, como un problema  social,ligado a la salud pública.

Un dato alarmante de la Organización Mundial de la Salud (OMS): Según estadísticas mundiales,3 de cada 10 adolescentes,sufren de violencia en el noviazgo,con características ligadas a la desigualdad de género, a la práctica de tratos injustos y discriminatorios, con poco acceso a la justicia.  

También,según el libro referido arriba,hay estudios que indican que una persona que ha sufrido violencia en el noviazgo tiene mayor probabilidad de ser víctima de violencia en el matrimonio,por lo cual debe prestarse bastante  atención preventiva a este problema entre los jóvenes.

COMO RECONOCER SI EXISTE VIOLENCIA EN EL NOVIAZGO.

Sobre este aspecto,extrajimos algunos tips que deseamos que el lector de este blog tenga en cuenta.

Según los autores Roberto Castro e Irene Casique, el noviazgo es una etapa de experimentación de dos personas que se atraen mutuamente. Un periodo para conocerse.  La violencia en este etapa, al igual que en el matrimonio, se manifiesta muchas veces de forma encubierta, con señales muy sutiles, que tienen la forma de maltrato emocional; psicológico;  físico e incluso sexual.  

Una de las formas mas usuales de violencia en el noviazgo es el emocional,  con la prevalencia de expresiones verbales que humillan,acosan, o minimizan a la víctima, todo dentro de un cuadro de manipulación, muy sutil. 

Una de las señales más comunes de violencia,según los expertos,es que el novio o la novia agresora (este es un problema simétrico,de hombres y mujeres) asume una conducta posesiva,de vigilancia permanente, sobre la victima; enojándose el agresor de forma extrema, cuando siente que la víctima esta fuera de su control.

Esta conducta posesiva de vigilancia extrema, hace que la víctima reciba un trato autoritario del agresor,se aisle de sus amistades, y muestre síntomas de baja autoestima, porque es controlada o controlado,en aspectos básicos, como su forma de vestir, de hablar, sus gustos etcétera.

Algo importante es que muchas veces este tipo de conducta no es percibida como violencia, sino confundida con el amor.  Cuando la victima es expuesta a este tipo de violencia,puede sufrir de depresión,caer en el fracaso escolar, sufrir trastornos alimenticios y hasta, lo peor: el suicidio.

COMO PROTEGERSE:
Para protegerse de este grave problema, o para proteger a nuestros hijos de ser víctimas; según los autores Roberto Castro e Irene Casique, tenemos como  principal factor de protección a la familia;núcleo donde debemos decidir buscar medios para informarnos de este tema, donde debemos reforzar la comunicación franca,para detectar las señales de violencia a tiempo; ofreciéndole al joven la confianza para hablar del tema y ayudándolos a mantener una autoestima alta,con la presencia de valores como el respecto y la tolerancia. 

Esta tarea está referida, por supuesto,a los valores en el hogar, y es una tarea de educación ciudadana, que deben asumir los gobiernos.

También es importante habilitar charlas en colegios,para tocar el tema de los buenos y malos tratos y sensibilizar, haciendo pensar a los jóvenes en sus propias realidades. Charlas que pueden ser solicitadas por las organizaciones de padres y maestros. Estas como algunas ideas preventivas.