La felicidad es un concepto muy resbaladizo, porque hay muchas definiciones de ella, y esto nos confunde.
Lo que sí creemos está claro, es que la felicidad no aflora de la nada. No se obtiene por generación espontánea: algo hicimos que nos condujo a obtenerla.
Según el escritor y pionero de la enseñanza de yoga en España,
Ramiro Antonio Calle Capilla, la felicidad no depende de la realidad, sino de
la interpretación que hacemos de la realidad. Es decir, de la óptica o
percepción que tenemos de las personas que nos rodean, de las situaciones, de
los mismos logros, de los fracasos…etcétera.
Esta aseveración la ratifica también el médico, Mario Alonso Puig, autor de “Vivir es un Asunto Urgente”, cuando afirma que la mayoría de las veces vemos las cosas con una lente distorsionada, y esto nos impide aprovechar lo que tenemos, porque solo nos enfocamos en lo que nos falta. (La felicidad no depende de lo que nos falta, sino del aprovechamiento de lo que tenemos, sintetizamos)
El mismo Puig enfatiza que una premisa inteligente sobre la felicidad ( vista la felicidad como un don que debemos construir )es acostumbrarnos a ver más allá de lo
aparente, aprender a agudizar la creatividad, y detectar lo que poseemos
(Aunque sea poco) y utilizarlo para impulsar el bienestar.
MITOS Y VERDADES SOBRE LA FELICIDAD
Este es un aspecto que no podemos obviar al hablar de
felicidad.
La felicidad está rodeada de mitos y de verdades. De
hecho, la felicidad, utilizada como concepto para Marketing, es un gran
negocio. Prometer felicidad si haces esto o aquello, generar ilusionismo
alrededor de ella, atrae clientes
Un mito muy generalizado, es que la felicidad solo se obtiene
del placer. También que sólo puedes ser feliz si estas rodeado de abundancia y
riqueza, o si tuviste la suerte de ser bendecido por la belleza física, o si
alcanzaste la fama y tienes miles de seguidores en las redes sociales. Esto son algunos
ejemplos de este mito.
En el ámbito de las verdades, una relevante, que está apoyada por
estudios serios en psicología positiva, es que la felicidad no es absoluta. Nadie es 100% feliz; además hay tiempos de
mayor y menor felicidad. No es una línea recta, la felicidad es relativa. ¿No te ha
pasado que conoces a alguien que tiene éxito, que proyecta una
vida envidiable, y cuando lo conoces mas de cerca, descubres lo contrario a la
felicidad: la persona muestra abundantes emociones negativas, como el miedo, la
envidia, el rencor, la inseguridad?
Otro Mito que surge de la relatividad del concepto, es que la felicidad es la ausencia total de sufrimiento. Esto no es así. En la felicidad hay algo particular: hay más emociones positivas que negativas; pero las negativas van y vienen.
En este matiz de dualidad cabe destacar a Ramiro Antonio Calle, quien expresa que la felicidad es una ecuación entre los logros y las expectativas, y mientras esa ecuación sea más moderada, más posibilidad tenemos de ser felices.
Y esa moderación depende de nosotros, de
cómo percibimos y nos conectamos con la realidad.
Aquí avanzamos a otra “verdad”, apoyada por la psicología, y es
que la felicidad no está lejos de nosotros, sino en lo más íntimo de nuestro
ser. La felicidad es nuestra
responsabilidad, es una tarea; no se da por azar, es producto del esfuerzo, de
la inteligencia, de ver la realidad con una lente lo más objetiva y equilibrada
posible.
También la felicidad, según la psicología positiva, es saber
maximizar las emociones positivas, y minimizar las negativas, sin caer en
actitudes evitativas o ilusionismos. Aquí creemos nosotros que está la fórmula mágica de la felicidad: en aprender a construir más emociones positivas y menos negativas. ¿Lo habías pensado ? Nosotros creemos que si es posible aprender a crear más emociones positivas y te daremos algunas ideas en las líneas que siguen.
CÓMO CONSTRUIR LA FELICIDAD
Ya expuesto algunas ideas relevantes sobre lo que es y no la
felicidad, te hemos preparado un dossier de “cosas” que puedes hacer y que
pueden ayudarte a construir tu felicidad, o por lo menos a abrirte un camino
hacia ella. Lo hemos tomado de diversos autores,
entre ellos, los mencionados en los párrafos precedentes.
Aquí va este
dossier:
Hazte
consciente de que la felicidad no depende únicamente de lo que nos sucede, sino
de la percepción que tenemos de lo que nos sucede.
Tener un pensamiento crítico equilibrado puede ayudarte.
Aprende a
no enfocarte tanto en lo que te falta, aprende a darle la vuelta a las cosas y disfrutar de lo que tienes. Esto implica ser más flexible.
Hay una
forma muy efectiva de buscar la felicidad y esta se apoya en poner en marcha
nuestros talentos y capacidades. ¡Constatar
nuestros talentos, a quien no hace feliz!
No hagas
las cosas por hacerlas, haz cosas que tengan sentido para ti o para una causa. Esto provee
seguridad y bienestar.
Cultivar
la espiritualidad también
provee seguridad y bienestar interior.
Acostumbrate a valorar lo que has hecho, si lo valoramos, nos estamos
auto-reconociendo y esto nos trae emociones positivas.
Algo muy importante: trata de sacar lecciones de los
fracasos. De las crisis surgen las más importantes transformaciones.
La felicidad no depende de que no tengamos emociones
negativas, depende de un equilibrio entre emociones negativas y positivas, por
lo cual te aconsejamos:
Aprender a disfrutar: Concéntrate en el presente. El pasado no volverá; el futuro
es expectativa y el presente, es el ahora, sobre lo cual puedes tener control.
Aprender a disfrutar el presente es abrirnos plenamente a las
experiencias, poniendo nuestra atención plena en las circunstancias,
sentimientos y experiencias. Un consejo: aprende a meditar.
Algo importantísimo: Siempre trata de hacer cosas que
vayan en dirección de tus valores personales. Todo lo que violente nuestros valores, nos hará
sufrir, está demostrado.
Expresa lo que sientes: Esto incrementa
nuestras sensaciones y aumenta la intensidad de lo experimentado. Las
experiencias pasadas podemos saborearlas compartiendolas con los demás, esto
incrementa nuestras relaciones personales.
Comparte con los demás: Esto puede producir emociones positivas, sobre todo
si lo hacemos con los que están peor que nosotros,animándonos y aupándolos para
el logro de sus objetivos. El compartir no está ausente de la nueva normalidad que vive el mundo, lo podemos hacer por internet o tomando las medidas de bioseguridad de obligatorio cumplimiento.
¿Qué te han parecido estos tips?
Esperamos que hayan sido útiles
Si deseas darnos tus comentarios, bienvenidos. Escribenos a
capacitacionproduseg@gmail.com